Cuando recibió la noticia, al exconcursante de Mujeres y Hombres y Viceversa le costó levantarse del sofá porque no acababa de creérselo.Su cara de incredulidad fue un poema y no consiguió disimular su disgusto. Todos los de la casa se quedaron perplejos y tuvo que ser el Súper el que les dijese que no era una broma.
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